Se me va esfumando el recuerdo lentamente, sonrisas y ojos
son lo que queda. Tras una larga búsqueda en un mundo conectado por cables,
lentamente pierdo el recuerdo y las ganas de seguir en la faena una hora más.
Cierro lentamente todas mis posibilidades, como cosa rara me siento fracasado y
asediado entre tantas fotos, nombres y fechas de cumpleaños. Poco a poco se
desvanece el recuerdo de la voz y del rostro. Poco a poco las ganas se han ido. Será lo que tenga que ser, sea lo que más quiera el mundo o la prueba
del destino, que burlándose de mi inexperiencia, me deja en el suelo de la
lluvia que cae por la venta. Hasta pronto. Nos veremos y sabremos más el uno
del otro en su momento. Una noche de copas una noche loca, bese otros labios,
olvide tu boca… y esa es la historia.