12.10.11

soledad

La cuestión social de la persona que invento la soledad, debe ser un gran idiota.
Corría la aventura de la vida de ser un gran poeta, de ser un vendedor de ilusiones que suprime las carencias del amor atravesé de aventuras de una sola noche,
una noche de pasión,
de sexo salvaje.
Caía la vida sobre la situación de buscar un empleo, un empleo para poder ser alguien más "conocido" en el mundo laboral, en el mundo de la situación de adultos, pero como la vida corre más aprisa cada día, gracias a los inventos electrónicos, decidí hacer algo con mi vida, algo más interesante que el tratar de ser poeta, de ser una persona más interesante, en el aspecto laboral. Ahí fue donde puedo decir que mi vida se terminó de cagar. Te conocí.
Sentada en el escritor de madera antigua, suspiras a cada rato, te saludé, hola fue tu única respuesta, seguías pensando en alguien, o algo, no se nunca te pregunte.
Después de un año de pasar saludándote y darte pequeños detalles como notas no firmadas y más de algún otro chocolate en tu escritorio, al fin te animaste a hablar. ¿Tenés un cigarro?, claro te respondí.... de ahí supe que tomaste un tren, compraste el boleto a la estación más lejana, a medio camino se te ocurrió que podías volar, saltaste de la ventana y .... creo que el resto es otra historia